13-14-15 de noviembre de 2025
Atención Primaria. Consulta programada de control de salud en Centro de Atención Primaria.
Revisión de Diabetes Mellitus tipo 2 y control de lesiones dermatológicas en talón derecho.
Enfoque individual
Varón de 89 años, con antecedentes de diabetes mellitus tipo 2 de larga evolución, hipertensión arterial, fibrilación auricular paroxística y psoriasis. Durante la consulta, además de la lesión en talón derecho, el paciente menciona que ocasionalmente mancha las sábanas con gotas de sangre en la zona de los pies.
A la exploración se objetiva placa eritematosa numular en talón derecho y lesión hiperpigmentada interdigital entre 4.º-5.º dedo del pie izquierdo, con úlcera superficial no dolorosa que el paciente no había identificado previamente. Sin signos de infección. Dermatoscopia: patrón pigmentado atípico y asimétrico, con múltiples tonalidades y área central sugestiva de regresión. Diagnóstico diferencial: úlcera en pie diabético vs melanoma. Se deriva de forma urgente a Dermatología y mediante telemedicina enviamos fotografías que evalúan en menos de 24 h.
Biopsia: melanoma lentiginoso acral invasor (Breslow 1,7 mm, Clark IV, ulceración presente, pT2b). Estudio de extensión con aparente afectación ganglionar, exéresis de ganglio centinela y pendiente anatomía patológica.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Lesión pigmentada en pie en paciente diabético: necesidad de diferenciar complicación crónica (pie diabético) de patología oncológica (melanoma). Problemas añadidos: pluripatología, edad avanzada y limitación de tiempo en consulta.
Tratamiento y planes de actuación
Exéresis de la lesión, coordinación con Dermatología y comité de melanoma. Continuidad asistencial en Atención Primaria para control de crónicos, curas locales y apoyo en seguimiento oncológico.
Evolución
El paciente evoluciona favorablemente tras la cirugía, en seguimiento conjunto entre Atención Primaria y Dermatología.
Este caso resalta la importancia del médico de familia en la detección de signos de alarma en el contexto de la consulta cotidiana. A pesar de la presión asistencial y del tiempo limitado, la valoración integral del paciente permitió diagnosticar precozmente un melanoma en una lesión a la que el propio paciente no daba relevancia. La reflexión clave es no claudicar ante los múltiples motivos de consulta, ya que un hallazgo aparentemente menor puede tener gran trascendencia clínica.